miércoles, 18 de mayo de 2016

Adrían Paenza otro K que sigue trabajando gracias a Monsanto

 

Adrían Paenza es otro bufón al servicio de la industria farmacéutica y Monsanto que sigue en funciones tras el cambio de gobierno y que continúa siendo un estrecho colaborador de Barañao, aunque finja "estar distanciado" (por Macri). Como un importante operador de las corporaciones transgénicas, Paenza trabaja directamente acorde a las directivas del Ministerio de Ciencia y Tecnología e Innovación Productiva de la Nación.


Clarín y otros medios de comunicación nuevamente mienten al público sobre una presunta enemistad entre el conductor de "Científicos Industria Argentina" y Lino Barañao, exponiendo razones superficiales e ideológicas mientras ocultan impunemente que ambos operan para las mismas compañías en detrimento de la Patria.

Como muchos saben, por su incansable trabajo para Monsanto y la industria farmacéutica, Lino Barañao logró conservar su puesto como funcionario público en el gobierno de "Cambiemos", pese a a las multiples denuncias por corrupción en su contra y en virtud a su pleitesía con las corporaciones extranjeras que envenenan el país. Ocurre lo mismo con Paenza.

HISTORIA

Paenza y Barañao precursores en la defensa patentes sobre la vida

Durante el gobierno de los Kirchner, Lino Barañao creo un sistema de préstamos (FONDEN y FONTAR) financiados con créditos del BID para proyectos de innovación originales o no (subsidios o préstamos con devolución) que en todos los casos debían ser susceptibles de ser protegidos por patentes a través de un tribunal de evaluación. La Agencia determina año tras año cuales son los proyectos susceptibles de recibir los subsidios. Más tarde, y por orden de Barañao, Adrían Paenza fue el encargado de convencer al ex presidente Nestor Kirchner de impulsar un modelo corporativo de patentamiento ideado por Monsanto. que llevó a la construcción del Polo Tecnológico para concentrar físicamente a los investigadores repatriados para proyectos agro-tecnológicos, nano-tecnológicos y de punta, siendo el mayor negocio el de las compañías transgénicas mientras el plan cierra cuando los recursos del Estado nacional son invertidos para investigaciones destinadas a "desarrollos innovadores nacionales" que tienen como destino las ganancias de las empresas semilleras que hacían lobby a Néstor Kirchner por el pago de royalties de propiedad intelectual.

Tras la presunta muerte de Nestor Carlos Kirchner, la presidente Cristina Fernández de inmediato accedió ($$$) a cooperar con Barañao y sus colegas de CONICET  en la operación de patentamiento de los desarrollos hechos en Argentina por científicos repatriados argentinos. Como resultado, los científicos y los desarrollos financiados por su gobierno, (alrededor de unas 20 solicitudes de patentes) se realizaron a cambio de ganancias fabulosas para las empresas Monsanto, Syngenta, Cargill o Nidera quienes monopolizan mas del 80% de las semillas transgénicas en el país.

¿QUIEN ES ADRÍAN PAENZA?
UN EPISODIO QUE LO DESCRIBE

Normalizando los pesticidas cancerígenos y la Ley Monsanto de Semillas.

El trabajo de Adrian Paenza fue y es mentir sistemáticamente al público sobre herbicidas, semillas transgénicas y vacunas. Por ejemplo y siguiendo ordenes estrictas de Lino Barañao, invitó a Pablo Pellegrini, "biotecnologo", investigador Asistente del CONICET y Doctor en Ciencias Sociales y Filosofía del Conocimiento, que mintió a los espectadores de la Televisión Pública sobre "las plantas híbridas" y el propósito de la Ley Monsanto de Semillas.

Para que conozcan a Adrían Paenza y entiendan porque continúa en la Televisión Pública al igual que Barañao lo hace en el gobierno.

Pablo Pellegrini empezó el 07/09/2015 en "Científicos Industria Argentina", con una frase que insulta la inteligencia con el objetivo de ridiculizar a la gente por creer que "las semillas caen de los árboles sin intervención del hombre". De hecho, las semillas no sólo caen de los árboles sin intervención del hombre sino que son parte primordial de la mecánica mediante la cual funciona la evolución de la vida desde mucho tiempo antes que existiera el hombre. Las semillas "caen de los árboles" y son ofrecidas por todas las especies vegetales del planeta Tierra gratuitamente.

En su feroz defensa a Monsanto, y respaldado por Adrían Paenza, Pellegrini utilizó otra conocida y mentira anti-ciencia de la corporación extranjera, al comparar la biotecnología con la selección de plantas realizada por los agricultores de la antigüedad: "Son plantas modificadas que no podrían existir sin la mano del hombre" (en referencia a la selección antigua). Esto es una falsedad y uno de los argumentos más utilizados por Monsanto. La selección de las plantas más fuertes se da en la Naturaleza por si sola. No es necesaria la mano del hombre, y este hecho no modifica el ecosistema. Luego y en la misma sincronía comparó el cruzamiento tradicional, "los híbridos" con los transgénicos, diciendo que cruzar plantas es lo mismo que inyectar genes de pescado, bacterias, y virus a las plantas por medio de la manipulación genética. Esto también es falso. El cruzamiento entre plantas familiares se da naturalmente por acción del viento o las abejas y no desequilibra el medioambiente. Mientras que las técnicas irresponsables de Monsanto jamás. ni en un millón de años, podrían ocurrir sin intervención humana, y si afectan gravemente al ecosistema.

Junto a Adrían Paenza, operador de Monsanto, su cómplice Pellegrini excusó la manipulación genética que incluye la introducción de genes absolutamente extraños a la planta de origen viral, bacteriano o animal al deslizar que  "por ejemplo", es útil "para crear plantas con resistencia a la sequía o resistencia a los herbicidas". Los cultivos orgánicos resisten mejor a la sequía que las plantas transgénicas, está científicamente probado. Y por supuesto ninguno de los dos mencionó en aquella entrega de "Científicos Industria Argentina", que los seres humanos no son resistentes a los herbicidas como las plantas de Monsanto.

A continuación, Adrían Paenza agregó, fingiendo que era "suya" la idea de diseñar plantas que contengan vacunas, que es un conocido y viejo proyecto de las corporaciones biotecnologicas como Monsanto. Lo cual calificó de "muy positivo", y que Pellegrini describió (asintiendo) como "bio-fabrica". Hace muchos años que la BBC promociona esta idea de la industria, no fue una "ocurrencia de Paenza".

A medida que llevaban al público con falacias y declaraciones engañosas a un terreno de absoluta irrealidad, Pellegrini señaló que "eso hace que quien desarrolla un producto quiera obtener un beneficio", repitiendo con que el campo "necesita a las biotecnológicas". Comparó las patentes transgénicas con las patentes de los medicamentos. Pfizer y Monsanto comparten propietarios, algo que tampoco mencionaron.

Pellegrini fue tan lejos en su defensa a la corporación Monsanto que se dedicó exclusivamente a defender las patentes y el hecho de que los productores tengan que pagar todos los años, alegando que sino "la industria biotecnolóigica no se hubiera desarrollado". Como si fuera útil y saludable contar con una industria que destruye la salud humana y el ecosistema.

El programa apuntó directamente a defender la Ley Monsanto de Semillas. y el "biotecnologo", vocero de Monsanto, justificó además que la corporación se tome atribuciones del estado al "crear un marco regulatorio" para cobrar derechos sobre las patentes, No se mencionó en ningún momento ninguna de las consecuencias de utilizar transgénicos con pesticidas para el suelo. "Monsanto es una de las corporaciones que más a trabajado para modificar los marcos regulatorios en los países, para proteger inversiones y su propio beneficio", agregó, y victimizando a Monsanto dijo que  "en el caso de la soja el 90% de las ganancias quedan para el agricultor". En ese momento intervino Adrían Paenza admitiendo que no quiere demonizar a Monsanto.

En este marco irreal construido mediante una estructura de engaños y mentiras, relatar que Monsanto presionó al gobierno nacional "mediante acciones en Europa a partir del año 2005, para prohibir que los embarques de soja llegados de Argentina pudieran comercializarse", hasta sonó justificable. "Finalmente la Corte Suprema Europea le dio la razón a la Argentina en el año 2010", dijo Pellegrini a lo que Paenza añadió sin pudor: "Sin Monsanto hay un montón de avances que no se hubieran producido", y añadió apresurado:"Tampoco es la única Monsanto, es la más conocida".

Audio

Celeste Fassbinder
BWN Argentina